Prefectura del Beni comunica denuncias de la existencia de personas en el PNIS depredando reservas forestales y faunísticas

[1988, Prefectura del Beni] «Notificación. La Prefectura del departamento, ante denuncias que han llegado a nuestro conocimiento en sentido de que existen personas afincadas en las jurisdicciones de Natividad de Plantota y Sigue leyendo Prefectura del Beni comunica denuncias de la existencia de personas en el PNIS depredando reservas forestales y faunísticas

TIPNIS: ¿Qué preguntas le hace el Tribunal al gobierno de Bolivia?

El Tribunal Internacional de Derechos de la Naturaleza (TIDN) hizo la entrega oficial al gobierno de Bolivia de un cuestionario para conocer el estado del proyecto de la carretera Villa Tunari – San Ignacio de Moxos en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS). Las respuestas al cuestionario serán incluidas en el informe de la comisión del Tribunal sobre su visita a Bolivia que será presentado en octubre.

Estas son las interrogantes del Tribunal:

Cuestionario informativo

Veríamos con agrado que el Gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia, a través de las instancias que correspondan, tenga a bien informar lo siguiente:

Estudios de Evaluación de Impacto Ambiental

  1. Si al momento de suscribir el contrato con OAS para la construcción de la carretera Villa Tunari – San Ignacio de Moxos, la misma contaba con la respectiva licencia ambiental y los Estudios de Evaluación de Impacto Ambiental para los tres tramos de la carretera.
  2. Después de la rescisión del contrato con OAS, qué procesos se siguieron para la contratación de las empresas ejecutoras y supervisoras que se adjudicaron las obras del Tramo I (Villa Tunari – Isinuta) y Tramo III (Santo Domingo – San Ignacio de Moxos), nombres, montos, plazos de ejecución de obras; y si podría especificar las medidas de mitigación ambiental que fueron incorporadas en dichos contratos y sus documentos anexos.
  3. Cuáles fueron procesos de contratación de las empresas ejecutoras y supervisoras que se adjudicaron las obras de los puentes sobre los ríos Isinuta, Sasama e Ibuelo (nombres, montos, plazos de ejecución de obras), y qué medidas de mitigación ambiental se incorporaron en dichos contratos y sus documentos anexos.
  4. Podría proporcionar las Fichas Ambientales y Estudios de Evaluación de Impacto Ambiental de los tramos I, II y III de la carretera Villa Tunari – San Ignacio de Moxos y de los 3 puentes que se construyen en el Polígono Siete que es parte del Parque Nacional Isiboro Sécure.
  5. Podría aclarar si según el ordenamiento normativo boliviano es un requisito que antes de suscribir un contrato para la ejecución de una obra de magnitud se debe contar con el respectivo Estudio de Evaluación de Impacto Ambiental y la Licencia Ambiental, y cuáles son las sanciones en caso de incumplimiento de este requisito.

Deforestación

  1. Podría informar la cantidad de hectáreas deforestadas en las décadas 70, 80, 90, 2000 y en la actualidad en el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Secure.
  2. Podría explicar cuáles son las principales causas de la deforestación en el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Sécure, cuáles han sido los impactos sobre la biodiversidad, así como sobre la comunidades de indígenas y los colonos, y qué medidas ha tomado su gobierno contra los autores de esta deforestación.
  3. Podría explicarnos las acciones concretas de reforestación implementadas entre el 2006 y el 2018 en el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Sécure y cuáles han sido los resultados en términos de cantidad de hectáreas y situación de esas áreas reforestadas.

Cultivos de coca

  1. Podría clarificarnos qué cantidad de hectáreas de cultivos de coca existían el año 2004 en el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Sécure, cuando se suscribió el convenio entre el expresidente Carlos Mesa y Evo Morales, presidente de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba.
  2. Podría explicarnos cuáles son las razones del 28% de incremento en los cultivos de hoja de coca en el Polígono Siete pasando de 861 hectáreas a 1.109 hectáreas entre 2015 y 2017, según los informes de monitoreo de cultivos de coca de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
  3. Podría explicarnos cuáles son las metas y plazos del gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia para reducir los cultivos de coca en el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Sécure.
  4. Podría explicarnos cuáles son las razones por las cuales los cultivos de hoja de coca se han incrementado 275% en el Parque Nacional Isiboro Sécure (excluyendo el Polígono Siete) pasando de 12 a 33 hectáreas entre los años 2015 y 2017 según los informes de UNODC.
  5. Podría clarificarnos si la hoja de coca que se produce en el Polígono Siete es apta para su masticación tradicional (acullico), y cuál es el destino de las 2.270 a 3.065 toneladas de hoja de coca que se producen anualmente según parámetros de UNODC.
  6. Podría explicar cuál es el estado de la demarcación de la línea roja que delimita el Polígono Siete, y qué instancia se encarga de controlar el no avance de la zona colonizada dentro del territorio indígena del TIPNIS.

Población indígena

  1. Podría detallar el número y nombre de las comunidades indígenas Yuracarés, Tsimanes y Mojeño-Trinitarias que existían dentro el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Sécure, según el censo indígena del Parque Nacional Isiboro Sécure de 1993, y explicarnos cuál es su actual situación en términos de titulación colectiva de la tierra, preservación de su idioma, fortalecimiento de su cultura y acceso a su territorio ancestral.
  2. Podría informarnos qué cantidad de colonos habían en el Polígono Siete del Parque Nacional Isiboro Sécure a principios de la década del 90, según los diferentes censos, y qué cantidad de colonos habitan ese territorio en la actualidad.

Consulta para el consentimiento libre previo e informado e intangibilidad

  1. Podría explicarnos por qué no se realizó la consulta para el consentimiento previo libre e informado a las comunidades indígenas del territorio indígena del TIPNIS, antes de suscribir el contrato con OAS y el crédito con el Banco Nacional de Desarrollo Económico Social (BNDES) del Brasil.
  2. Podría aclararnos si es cierto que durante la consulta que se realizó en 2012 a comunidades indígenas del TIPNIS, representantes del gobierno explicaron que el término “intangibilidad” significaba que no se puede cortar ni una rama de un árbol ni hacer ninguna clase de proyectos, tal cómo lo dijo el vicepresidente Álvaro García Linera el 4 de agosto de 2017 en una entrevista televisiva: “la intangibilidad… significa que usted no puede sacar una hoja, usted no puede levantar una rama, usted no puede tocar nada, es decir, no puede hacer una escuela, un hospital, no puede hacer perforaciones para colocar agua potable para los compañeros”.
  3. Podría explicarnos por qué si la definición de intangibilidad del vicepresidente Álvaro García Linera es correcta, hemos podido apreciar que entre el 2011 y el 2017 se han construido postas sanitarias, tomas de agua, telecomunicaciones satelitales y caminos vecinales en la comunidad de Trinidacito y regiones aledañas que están en el centro del TIPNIS.
  4. Podría explicarnos por qué si la intangibilidad estaba vigente en el Parque Nacional Isiboro Sécure -que incluye el Polígono Siete- se procedió a construir tres puentes de gran envergadura dentro de dicho Polígono Siete.
  5. Podría proporcionarnos la documentación de respaldo de los procesos de consulta realizados a comunidades indígenas Moxeño-Trinitarios, Tchimanes, Yuracarés, y Moxeño-Ignaciano de la Tierra Comunitaria de Origen Territorio Indígena Multiétnico (TIM), para la construcción del Tramo III Santo Domingo – San Ignacio de Moxos.

Chaparina

  1. Después de 7 años de investigación, podría aclararnos quiénes fueron los autores intelectuales y materiales de la represión policial a los marchistas de la octava marcha indígena ocurrida el 25 de septiembre de 2011.
  2. Podría informarnos qué sanciones han recibido los autores intelectuales y materiales de la represión de Chaparina, y qué medidas ha asumido el Estado Plurinacional de Bolivia para que no se repita esta grave violación a los derechos humanos.

Concesiones de exploración petrolera

  1. Podría informarnos si se han otorgado concesiones de exploración y/o explotación petrolera que abarcan parte del Parque Nacional Isiboro Secure: número de concesiones, empresa titular, fecha de otorgación, años de vigencia, estado de situación de la concesión, etc.

Impactos de una futura carretera y derechos de la Madre Tierra

  1. Podría explicarnos qué medidas adoptará el gobierno para evitar la deforestación que provocará la construcción de una carretera por el TIPNIS, y que según parámetros de otras carreteras en la Amazonía genera un promedio de 3 km de caminos vecinales por km de carretera y una deforestación que se extiende a más de 20 km de distancia de la carretera.
  2. Podría clarificarnos qué especies animales y plantas se encuentran en peligro de extinción en el Parque Nacional Isiboro Sécure, cómo la construcción de la carretera podría agravar su situación y qué medidas asumirá el gobierno de Bolivia para evitar que esto ocurra.
  3. Podría informarnos sobre los estudios que ha realizado el gobierno de Bolivia, sobre los impactos de la expansión de la deforestación en el Parque Nacional Isiboro Sécure y la generación de nubes y lluvia en otras regiones de Bolivia.
  4. Podría informarnos qué disposiciones legales, operativas y administrativas ha adoptado el Estado Plurinacional de Bolivia desde la aprobación de la ley Nº71 de Derechos de la Madre Tierra, para la protección de la inconmensurable biodiversidad que se encuentra en el Parque Nacional Isiboro Sécure.
  5. Podría explicarnos por qué hasta la fecha no se ha puesto en funcionamiento la Defensoría de la Madre Tierra creada por el Artículo 10° de la Ley Nº 71 de Derechos de la Madre Tierra.
  6. Podría explicarnos las posibles afectaciones y beneficios a las comunidades indígenas Yuracarés, Tchimanes y Moxeño-Trinitarios de construirse una carretera que una los tramos I y III.

Puede leer: TIDN solicita información sobre el TIPNIS al gobierno de Bolivia

El Unicornio azul del Isiboro Sécure en riesgo de extinción

Conocida como “Unicornio azul”, la pava Copete de Piedra es una de las aproximadamente 470 especies de aves del Parque Nacional y Territorio Indígena Isiboro Sécure (TIPNIS). Esta hermosa ave (Pauxi unicornis unicornis) está catalogada como especie con alto riesgo de extinción por la amenaza humana[i].

Una de las amenazas más preocupantes para los ambientalista es la actual construcción de la carretera San Ignacio de Moxos – Villa Tunari. Los investigadores aseguran que este proyecto vial contribuirá al exterminio del “unicornio azul del Isiboro Sécure”, si no se toman medidas oportunas que permitan su protección[ii] ; ya que la vía afectaría sus corredores habitales entre pisos ecológicos, así como su acceso a determinados frutos y a ríos.

A su vez, la carretera por la Amazonía potencia otras amenazas a las que esta especie se enfrenta: desmonte de su hábitat, excesiva caza, chaqueos. Ante las crecientes y constantes amenazas, el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap), hace unos 15 años, incluyó a esta ave en la categoría críticamente amenazada si se altera su hábitat en la Amazonía, pues se estimaba una población de 200 individuos. El Libro rojo de las especies en riesgo la cataloga en el grupo con peligro crítico de extinción por el acceso de colonos cazadores y recomiendan más investigaciones sobre su biología, ecología y su distribución.

Más allá de promover la aplicación de legislación proteccionista sobre la vida animal, la imposición del proyecto carretero por parte del Estado boliviano vulnera los derechos de la Naturaleza en el caso de las especies en riesgo: 1a. Derecho a la vida y a existir; 1b. Derecho a ser respetada; 1c. Derecho a la regeneración de su biocapacidad y continuación de sus ciclos y procesos vitales libres de alteraciones humanas; 1j. Derecho a una restauración plena y pronta por las violaciones a los derechos reconocidos en esta Declaración causados por las actividades humanas.

Riqueza biológica

El ornitólogo (especialista en el estudio de aves) de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), Jose Balderrama, realizó una investigación acerca de las aves que habitaban en el TIPNIS durante la gestión 2004: “Hasta el año 90 teníamos sólo 78 especies y ahora tenemos 470, esto significa que en el Isiboro Sécure hay más de un tercio de la avifauna que existe en toda Bolivia”[iii], dijo al diario Opinión.

Lo más característico de esta ave es su cuerno cilíndrico y largo de color azul. El tamaño total de su cuerpo es de 85 a 95 centímetros. En general su zona ventral es de color negro y la punta de la cola la tiene blanca. Sus patas son de color rojo pálido y el pico rojo brilloso. Algunas hembras presentan el plumaje de color café rojizo[iv]. Anidan una vez al año poniendo entre uno o dos huevos durante el último cuatrimestre de cada gestión.

Esta especie sólo existe en Bolivia y Perú. En Bolivia está presente en las áreas protegidas TIPNIS, Amboró y Carrasco. Tiene una distribución discontinua y restringida en los departamentos de Beni, Santa Cruz y Cochabamba, y habita en los bosques tropicales y amazónicos.

[i]  http://www.ende.bo/public/imgs/corporacion/LIBRO-Aves_Magicas_de_Bolivia.pdf

[ii] http://www.tipnisesvida.net/tipnisdocuunicornio.htm

[iii] http://opinion.com.bo/opinion/informe_especial/2011/1003/suplementos.php?id=1650

[iv] http://amazoniabolivia.com/amazonia_bo.php?id_contenido=1991&opcion=detalle_not

Cinco bufeos tienen un rastreador satelital

El Delfín Rosado o Bufeo, uno de las especies con alto valor biogenético de la fauna amazónica boliviana, que habita en el Parque Nacional Isiboro Secure TIPNIS es considerada una especie en peligro de extinción por instituciones internacionales. El Acuerdo Internacional de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), del cual Bolivia es miembro, la ha catalogado en sus listas en el Apéndice II. La Lista Roja o libro rojo elaborada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), también la ha incluido en sus listas.

Gabriela Tavera

Entre fines de noviembre y principios de diciembre de 2017, científicos de la Asociación Faunagua realizaron una delicada expedición científica sin precedente. Su misión se concentró en las aguas claras del río San Martín de la comunidad de Bella Vista.

El nombre completo del lugar es Parque Departamental y Área Natural de Manejo Integrado Iténez del departamento del Beni. El área protegida se encuentra aproximadamente a 330 kilómetros al noreste de la ciudad de Trinidad.

El objetivo principal de la misión: capturar y marcar cinco delfines rosados bolivianos, más comúnmente conocidos como ´bufeos´, con dispositivos de rastreo satelital para dar seguimiento a sus movimientos y rutas de migración en los ríos de la cuenca por un periodo máximo de seis meses.

El trabajo fue realizado en alianza con el Fondo Mundial para la Vida Silvestre (WWF por sus siglas en inglés) y con la autorización de la Dirección General de Biodiversidad y Áreas Protegida (DGB-AP).

La operación estuvo coordinada por los biólogos Paul André Van Damme y Leslie Córdova, de Faunagua, quienes contaron con el apoyo técnico de Adriana Salinas en la toma de datos, de Aldo Echevarría -también biólogo- para la toma de muestras y colocado de los ‘tags’ (nombre de los dispositivos tecnológicos que fueron emplazados en los delfines) y de Carla Pérez, veterinaria, que, acompañada de su asistente Wilson Miranda, estuvo a cargo de monitorear la salud y bienestar de los animales durante el proceso.

Contando delfines
La Asociación Faunagua es una institución no gubernamental sin fines de lucro que lleva más de quince años trabajando en distintos proyectos de conservación y manejo de recursos naturales para el desarrollo local sostenible en ecosistemas acuáticos de Bolivia.

Si bien la asociación lleva desde el año 2007 realizando importantes estudios de investigación respecto al bufeo, cuyo nombre científico es Inia boliviensis, estos estuvieron en su mayoría orientados a conocer la abundancia y la distribución de los cetáceos en el país.

“Nos hemos pasado diez años contando delfines y evaluando por dónde se los puede encontrar, por todos los ríos de la Amazonía boliviana -comenta Paul Van Damme, director de la institución-. Ahora, por primera vez en la historia de esta especie, vamos a poder conocer los movimientos y las rutas de migración de los bufeos. Estos datos son fundamentales para avanzar en el estudio de la ecología de los delfines bolivianos y así poder dirigir mejor las estrategias y acciones para su conservación”.

Leslie Córdova, masterada en zoología, especializada en sistemas acuáticos, que trabaja junto a Van Damme desde hace varios años, fue asignada como la ‘líder de captura’ de la expedición, teniendo bajo su cargo la responsabilidad de coordinación y logística del viaje.
Córdova pasó semanas estudiando, analizando, evaluando y adecuando un estricto protocolo de captura que fue utilizado con un mes de anterioridad en el vecino país de Brasil donde otros cinco delfines de río (de diferente especie a los bolivianos) fueron marcados por personal del Instituto de Investigación Mamirauá, utilizando la misma tecnología.

Según comenta Córdova, el protocolo tuvo que ser adaptado tomando en cuenta el contexto local, como por ejemplo las condiciones del río, profundidad y accesibilidad.

Córdova considera además que un factor clave para el éxito de la operación fue la buena relación y coordinación que se sostuvo con el personal local de Bella Vista, que estuvo involucrado en cada una de las etapas de planificación.

“Desde el inicio tuvimos reuniones en Bella Vista con los pescadores y la gente local para explicar el proyecto -comenta Córdova-. Si bien en la zona ya nos conocen porque hemos trabajado mucho en el área y hay una buena relación con la gente del lugar, los pescadores entendieron perfectamente la importancia que tenía realizar este estudio, entonces se involucraron en todo y pusieron todo de su parte, hasta el más mínimo detalle para que todo saliera bien”, dice.

“Yo puedo conocer mucho acerca de la pesca, manejar material y redes de pesca y conocer toda la teoría del mundo, pero si no existe apoyo del personal local, entonces no se  hace nada, ellos son los que conocen los mejores lugares, y conocen sus ríos mejor que nadie y eso es clave a la hora de tomar decisiones”.

Con ayuda local
Los científicos, que trabajaron en un laboratorio portátil instalado a orillas del río, contaron con el apoyo del ‘equipo de agua’ conformado por diez pescadores locales de la comunidad de Bella vista y cinco guardaparques del PD-ANMI Iténez. Este equipo estuvo liderado por Alexander Vásquez Ayala (Pato), asignado como coordinador del grupo de pescadores.

El grupo tuvo a su cargo la captura y manipulación directa de los animales en agua, conocidos localmente por su carácter sociable, y de la coordinación permanentemente con el equipo de científicos en tierra.

Hay unión, familiaridad y confianza entre los pescadores, como miembros de una comunidad que se conoce en las tareas diarias en el río. Pato es un hombre ágil, jovial y lleno de energía, a mediados de sus veinte. “Eso de líder del grupo de pescadores fue solo un nombre, fue solamente para que haya una sola persona que se comunique con el equipo de tierra y no haya mucho barullo, pero fue solo eso, porque después yo sin el resto de los pescadores no hago nada, el trabajo se hace entre todos” expresaba. Moisés Vásquez Salvatierra es un treintañero alto y robusto. Está orgulloso del trabajo realizado en el Parque Departamental y Área Natural de Manejo Integrado Iténez en el departamento del Beni. En esta área protegida Moisés desempeña sus funciones como jefe del cuerpo de protección del parque.  “Hemos hecho la captura y hemos colocado microchips rastreadores a los delfines, a los bufeos, para ver si ellos migran, dónde van o si se quedan en un solo lugar. Estoy la verdad feliz, porque todo salió bien, un éxito”, comenta Moisés, todavía con el cansancio de tres intensos días de trabajo. “Me llena de satisfacción que no se lastimó a ningún bufeo. Eso es lo que yo quería ver con mis propios ojos como jefe del cuerpo de protección y como responsable del área protegida”.

Pato también dijo algunas palabras. En su rostro se veía satisfacción por la destreza y el profesionalismo mostrados por él y sus compañeros en el trabajo: “Mil gracias a todo el grupo de nosotros los pescadores y gracias también a los grupos que han venido de otro lado, creo que todo el trabajo se hizo en coordinación”.

Pato trabajó estrechamente con Córdova en la planificación, realizando visitas previas al río semanas antes de la expedición. Juntos evaluaron los posibles sitios de captura en el río, el número de embarcaciones que se requeriría, el tamaño y tipo de redes, así como todos los restantes detalles logísticos. Revisaron el protocolo de captura con la finalidad de conseguir los mejores resultados posibles para las labores que se realizarían en campo y para garantizar en todo momento el cuidado para con los delfines.

Tanto Alexander Vásquez (Pato), como Moisés Vásquez, jefe de guardaparques, consideran que el bufeo es un animal que “no le hace daño a nadie” y es por esto que en la zona no se los mata a propósito. Cuando un bufeo se enreda por accidente en una malla de pesca los pescadores afirman que es menester liberarlo, aunque en algunas ocasiones lamentablemente sí se producen muertes de los delfines por ahogamiento cuando la liberación no se realiza a tiempo. “Más bien es un animal que lo salva a uno” dice Moisés. “Si alguien se está ahogando ellos lo sacan”.

Siguiendo el protocolo de captura, en silencio y de manera coordinada, los pescadores ingresaron al río utilizando varios cercos de redes para ir reduciendo el espacio de agua a los bufeos. Cuando el animal quedó aislado, se introdujo una camilla, diseñada especialmente para esta operación, sobre la que se subía al animal, que era trasladado fuera del agua para ser entregado al equipo de científicos en tierra.
Todo el proceso estuvo constantemente monitoreado por la doctora Carla Pérez para garantizar el bienestar de los animales. De esta manera, científicos y personal local lograron capturar y marcar exitosamente un total de cuatro individuos machos y una hembra en el río San Martín, perteneciente a la cuenca del río Iténez. Primo, Dame, Joaquín, Martín y Ponchita fueron los nombres asignados a los bufeos por parte del grupo de pescadores y guardaparques.

La leyenda, la ciencia
El bufeo es un animal conocido en las poblaciones ribereñas tanto por leyendas que lo rondan, como por las historias acerca de bufeos que rescatan a personas que están ahogándose en los ríos. Esto confiere a la especie un elevado valor cultural.

Hay otras características que también le otorgan un significativo valor para el mundo de la conservación. Estudios genéticos de principios del milenio demuestran que Inia boliviensis es una especie que surge entre hace 50.000 a 500.000 años, después de un proceso de diversificación genética que pudo haber comenzado hace seis millones de años y que parece haber sido propiciado por diversos procesos geológicos ocurridos en el periodo del Pleistoceno, como movimientos de placas tectónicas e incursiones marinas que formaron lo que hoy se conoce como la cuenca alta del río Madera.

En esa cuenca habita hoy en día el bufeo. Está aislado de las demás especies de delfines de río sudamericanos por la serie de cachuelas al norte del país que comprenden el tramo entre las poblaciones de Guayaramerín en Bolivia y Porto Velho en Brasil.

A pesar de que Bolivia es conocida internacionalmente como un país andino, 65,7% de su territorio es amazónico. La cuenca alta del río Madera, que se sobrepone casi enteramente a nuestro país, drena el agua de una superficie aproximada de 700.000 Km2, a través de la cual transporta sedimentos y nutrientes desde la cordillera de los Andes hasta el gran río Madera, uno de los principales afluentes del gran Amazonas (uno de los cinco ríos más importantes del mundo).

Todo este ecosistema se constituye en la columna vertebral que sostiene la economía de las poblaciones ribereñas.
En Bolivia son 34 las poblaciones indígenas reconocidas oficialmente por el Estado que se identifican en la Amazonía de Bolivia. En esas comunidades, más del 90% de la ingesta proteica de la población proviene del consumo de los peces de los ríos y lagunas de la cuenca.
En este complejo mosaico de sistemas acuáticos es donde se produce el intercambio de nutrientes que dan como resultado la fertilización de los suelos de los bosques amazónicos.

El bufeo es el único mamífero exclusivamente acuático que habita esta región en el país y cumple un importante rol como ‘predador top’ al encontrarse en la cúspide de la cadena alimenticia.

Esto quiere decir que el delfín boliviano no solo es una especie única y particular porque no se encuentra en ninguna otra parte del mundo, sino que además las funciones ecológicas que cumple en el lugar que habita, no pueden ser enteramente sustituidas por ninguna otra especie.

Hay un plan 
En el país los recursos para realizar estudios de investigación siempre son limitados y provienen en su gran mayoría de fondos extranjeros. Enfocar esfuerzos en especies como el bufeo, que no solo es una especie altamente llamativa y carismática, hace que a través de ella se puedan conocer también muchos otros aspectos del ambiente que habita; por lo tanto, al tomarse acciones para su conservación, se protege automáticamente a muchas otras especies de animales y plantas que se encuentran dentro de su rango de distribución y por debajo de ella en la cadena alimenticia.

Actualmente el bufeo es la única especie en Bolivia y Sudamérica que cuenta con una  propia ley de protección nacional (Ley No. 284 de 18 de septiembre de 2012 que declara al delfín de agua dulce boliviano Patrimonio Natural del Estado Plurinacional de Bolivia) y un plan de acción para su conservación, avalado por el Ministerio de Medio Ambiente y Agua. Este plan de acción actualmente se encuentra en revisión por parte de la autoridad ambiental para ser lanzado en su segunda versión.

El estudio de seguimiento a través del monitoreo satelital de los delfines como el que lleva a cabo actualmente Faunagua, contribuirá a conocer más acerca de la ecología de la especie y cómo los cambios en el sistema afectan sobre la misma. Se espera enviar los resultados al Ministerio de Medio Ambiente del país para que sean tomados en cuenta en el diseño de las estrategias actualizadas para garantizar la protección del bufeo y su entorno.

“Existen especies como el bufeo o el dorado que tienen importancia por varios factores. En el caso del bufeo, es carismático, tiene valor cultural, pero además es un buen indicador de la salud de los ecosistemas. Esta acumulación de factores nos hace canalizar el esfuerzo y los fondos para preservar estas especies”, comenta Van Damme, director de Faunagua. “El bufeo regula toda la cadena trófica, entonces sabemos que si algo pasa con él,  la cadena pierde su equilibrio natural. Por esto, a través del estudio de esta especie que llega a ser emblemática para la Amazonía boliviana, podemos saber mucho acerca de su entorno y la afectación del mismo por causa de impactos provocados en el sistema, además cómo estos cambian a lo largo del tiempo. Básicamente estar al pendiente. Los avances tecnológicos como el marcado de los delfines con dispositivos de rastreo satelital ayudan a que, en poco tiempo, con menor esfuerzo y menor inversión económica se obtenga mayor cantidad de información. Esas son las ventajas que nos da hoy en día la tecnología para poder hacer conservación”.

En palabras del científico, no es lo mismo que los bufeos realicen movimientos locales o que migren grandes distancias, puesto que al migrar, la vulnerabilidad de la especie estaría expuesta a una mayor cantidad de riesgos. En este caso, los impactos de una actividad en un sitio y los impactos de otra actividad en otro lugar, aun estando alejado el primero del segundo, podrían generar efectos acumulativos que afecten negativamente a la especie. Estos efectos acumulados son mucho más difíciles de evidenciar y de cuantificar.

Esfuerzo para conservar
Un estudio publicado en la revista científica Nature en junio de 2017 revela que más de una centena de represas ya han sido construidas en la cuenca Amazónica en Sudamérica y se tienen numerosas propuestas para futuras construcciones en Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil.

El estudio demuestra que los efectos ambientales negativos tanto de las represas existentes como las propuestas en caso de ser construidas podrían generar disturbios tanto en la estructura física del paisaje como en elementos biológicos como flora y fauna que, afectarían toda la llanura de inundación de la Amazonía entera. Se evidencia la elevada vulnerabilidad de la cuenca alta del río Madera a estos efectos. Área sobrepuesta al territorio boliviano donde habita el bufeo.

Periplo registrado
Después de tres meses de seguimiento de los delfines que fueron marcados a fines del año pasado en el río San Martín, los resultados preliminares muestran el desplazamiento de los cetáceos de hasta 330 km a lo largo de los sistemas acuáticos de la cuenca del río Iténez. El estudio se realiza en coordinación con instituciones de Brasil, Colombia, Ecuador y Perú, países que también marcaron o están en proceso de planificación del marcado de sus correspondientes delfines de río utilizando el mismo método.

El Instituto Mamirauá en Brasil, la Fundación Omacha de Colombia, la Asociación Faunagua de Bolivia y Pro Delphinus en Perú se encuentran entre las instituciones aliadas que actualmente trabajan en colaboración y coordinadamente para la conservación de los delfines de río en Sudamérica.

Si bien uno de los grandes objetivos de expediciones como la llevada a cabo el pasado fin de año es ampliar la frontera del conocimiento de esta especie emblemática, también lo es valorizarla para las poblaciones locales. Como mencionaba Moisés Vásquez del PD-ANMI Iténez, “todo lo que se hace por dar a conocer el área protegida es bueno, pero también es bienvenida toda la información, porque así podemos conocer más acerca de los recursos naturales que tenemos aquí, a nuestro alrededor, todo lo que nos rodea y que es nuestra responsabilidad proteger”.

eldeber.com.bo

08/04/18

La ampliación de la vía a Santa Cruz facilita tráfico de animales silvestres

Los trabajos de ampliación de la carretera hacia el trópico y Santa Cruz se realizan cerca a la entrada del Parque Nacional Carrasco, uno de los más diversos del  país. El ensanchamiento de la vía ha provocado que la zona se convierta en este momento en la más crítica para el tráfico y pérdida de especies silvestres, debido al fácil acceso e invasión de su hábitat.

El acelerado crecimiento urbano que va de la mano de la ampliación de vías camineras es otra amenaza para varias especies de animales silvestres, además que provoca su migración.

Las especies más afectadas son los jaguares, osos jucumaris y aves endémicas (paraba frente roja y monterita). El último caso registrado fue el de “Pancho”, el oso perezoso que sobrevivió tras ser atropellado en la carretera hacia Cotoca y cuya historia conmovió.

“Las zonas críticas de momento son la carretera de Cochabamba a Santa Cruz: con los proyectos que se han implementado ahí, se han abierto caminos y lamentablemente muchas personas han aprovechado para ingresar a áreas naturales y hacer uso de las tierras hacia la parte yungueña”, informó el responsable

del Proyecto de Biodiversidad  (Pro-Bio) de la Secretaría de Madre Tierra de la Gobernación, Omar Osco.

Añadió que los pobladores optan por “liquidar” a algunas especies por miedo a ser lastimados.  Como el caso de jucumari que fue golpeado en Tiraque, hace dos años.

Según datos de Pro-Bio, en promedio, se registra un caso de tráfico de animales por día (365 al año). El 80 por ciento corresponde a  la tenencia en  espacios domésticos, 10 a rescates y  10 a decomisos.

“Cuando se invaden áreas naturales muchos se encuentran con animales y los toman de mascotas o como potencial mercancía, que es mucho más peligroso”, dijo el responsable de la  Fundación Gaia Pacha, Rodrigo Meruvia.

Resaltó que las estadísticas muestran que cuando los animales son traficados a las ciudades 8 de 10 no sobreviven. Los que se salvan entran en depresión, desórdenes alimenticios y estrés que los desgasta.

El director de la Policía Forestal de Medio Ambiente (Pofoma), Aldrin Corrales, manifestó que esta instancia reportó 100 casos de tráfico este año. “Hemos visto como mucho animales se mueven por comida, ingresan a domicilios y es porque  invaden su hogar”, dijo.

Tres áreas afectadas: los parques Carrasco, Tunari e Isiboro Secure (Tipnis) sufren la invasión de hábitats naturales por las ampliaciones de carreteras.

Venden especies hasta en $us 2 mil

El director de la Policía Forestal de Medio Ambiente (Pofoma), Aldrín Corrales, manifestó que la mayor motivación para los traficantes de animales silvestres es la ganancia económica. “Por ejemplo, tuvimos un caso de tráfico de seis guacamayos, cada uno se iba vender en 2 mil dólares en Chile”, informó.

Las especies tienen más valor al ser vendidas en el exterior. El delito de tráfico de animales se sanciona con tres años de cárcel.

El Oso Perezoso «Pancho» se recupera de operación

El oso perezoso conocido como “Pancho” fue operado ayer de manera exitosa en la veterinaria Agroflori y ahora se encuentra en fase de recuperación. “Pancho” fue atropellado el pasado viernes en la carretera hacia Cotoca. El accidente ocasionó un daño irreversible en su glóbulo ocular izquierdo y una fractura en su brazo derecho.

La médico veterinaria Sheyla Méndez señaló que su tiempo de recuperación dependerá de cómo reciba su organismo la placa y cuatro tornillos que le fueron insertados en el húmero derecho.

“La herida del brazo irá cicatrizando y ya veremos cómo evoluciona su recuperación”, dijo. El oso recibirá tratamiento médico durante los siguientes 10 días y estará en observación 24 horas. Por el costo del tratamiento  se recolectan fondos. Se puede pedir datos al 76410200 y 4424177.

PUNTOS DE VISTA

«La carretera en sí no debería ser un problema, el  conflicto es la gente que viene detrás. El punto neurálgico es  cómo controlar que la gente no entre a los hábitats naturales de animales». Omar Osco. Resp. programa Pro-Bio.

«La sociedad va creciendo y va invadiendo los hábitats de los animales. Como se afecta sus hogares, muchos ellos van a buscar alimentos a otros lados y se los encuentra hasta en los domicilios». Aldrin Corrales. Director de Pofoma

lostiempos.com

26/07/18